Pues ya les había dicho que sí.
Ya me había comprometido y no podía dar marcha atrás. Pero ¿Qué iba a contarles yo a los que vinieran a la charla? Es cierto que había sacado un 10 con Matrícula de Honor en el Trabajo de Fin de Grado (TFG) , sin embargo mi caso era diferente. Yo había empezado con este trabajo mucho antes que los demás. Había empezado antes de lo normal y claro, ellos ya no estaban a tiempo de empezar tan pronto. La charla sería casi en diciembre y en diciembre ya es la mitad del curso.
Pero me habían llamado y yo había dicho que sí.
Ahora era oficialmente ponente en la charla «Yo ya defendí mi TFG el año pasado: Parte I».
Ahora tenía que pensar qué iba a contarles.
Podía haber contado de qué iba mi trabajo y cómo había sido el proceso de elaboración pero me di cuenta de que yo no asistiría a una charla así. Así que decidí pensar en los asistentes y en qué podía aportarles al suyo.
Decidí que iba a darles los consejos que me habría gustado recibir a mi. Los que había aprendido por las malas trabajando ya que al fin y al cabo, después de tanto tiempo, uno aprende algo y se da cuenta de que si lo hubiera aprendido antes, hubiese terminado más rápido.
Además, puesto que yo había visto los problemas que habían tenido muchos de mis amigos e incluso les había dado consejos, pude recopilar todos estos errores que no repetirían de haber sido avisados y escribir un buen guión para la charla.
Así que hecho esto, me puse manos a la obra y preparé una presentación que era en si misma un ejemplo de cómo debe hacerse una presentación para defender un tema, en este caso su TFG. Esta presentación la dejo por aquí por si quieres verla para ver qué puedes aprender. Observa que hay poco texto de manera que se pueda seguir mi explicación y no se distraiga el público leyendo. Así mismo, la gran cantidad de imágenes hace que sea muy visual. Si quieres un breve PDF en el que te cuento la charla en profundidad y en el que te doy mis consejos para hacer un buen trabajo de fin de estudios deja tu correo en el formulario que encontrarás al final y te lo haré llegar. Es gratis. Bueno, gratis a cambio de tu correo. De vez en cuando escribo correos breves con cosas que pienso que te pueden ayudar. Si ves que no te sirven de nada, pues te vas. Tampoco cobro por esto.
Finalmente llegó el día. Allí estaba yo. En el escenario del salón de actos dónde tantas veces asistí como oyente a lo largo de la carrera. La verdad es que disfruté mucho y salió bastante bien. Y no porque lo diga yo, el vicedecano de innovación docente estuvo de acuerdo conmigo. Por mi parte, lo que más me agrada es saber que hay gente que pudo aprovechar los consejos y aprender de los errores míos para no tener que equivocarse ellos. Al fin y al cabo, ese es mi trabajo.
Si tú también quieres aprender de mi experiencia: